viernes, 10 de junio de 2011

7.Hacia una energía sostenible

Un modelo energético sostenible tiene que realizar lo siguiente:

- Reducción de la enorme dependencia energética (cerca del 90% en nuestro país)

- Descarbonización de la economía, es decir, reducción del consumo de energías fósiles, que son el responsable de la emisión de la mayor parte de los gases de efecto invernadero, principal factor del cambio climático.

- Reducción de la obesidad energética de nuestra sociedad, mediante el ahorro y la eficiencia energética.

- Lucha contra la pobreza energética (se estima que cerca del 8% de los españoles sufren una pobreza energética)

- Energía saludable. Promoción de un modelo energético menos contaminante que minimice la contaminación atmosférica.

- Internalización de los costes ambientales de la energía.
 Para ello, se considera necesario un modelo energético que promocione:

- Una apuesta decidida por el empleo y el desarrollo de las energías renovables, que ha dejado de ser una quimera y una alternativa, para ser una realidad, analizando para cada caso su adecuación e impacto ambiental.

- El ahorro y la eficiencia energética, que debe ser planteadas desde la planificación estratégica como desde el desarrollo de proyectos, promocionando una cultura del ahorro energético a todos los niveles.

- Modernización de las redes de transporteenergético, no sólo para el aseguramiento y estabilidad del suministro, sino con la aplicación sistemas inteligentes que permita una implementación de políticas de gestión de la demanda y permita una mejora en la eficiencia en el consumo energético.

- La movilidad sostenible, especialmente en las áreas urbanas, así como en el transporte de mercancías.

- La generación de empleo de la manera más descentralizada posible.

- Un modelo fiscal que repercuta los costes ambientales de la producción de la energía, a un precio justo de la misma.

- Un apoyo continuo y decidido a la investigación a las tecnologías energéticas, la innovación en sus aplicación y el estudio de sus efectos a todos los niveles, tanto científico, tecnológico, ambiental, económico y social.

- Promoción de sistemas de información transparente sobre la producción energética, la eficiencia, el consumo, etc.

-Promoción de sistemas de información tales como  la huella energética o huella de carbono, para estimular distintos comportamiento en los hábitos de consumo.



  

6.Fuentes renovables de enegía.

Las Fuentes de energía renovables son aquellas que, tras ser utilizadas, se pueden regenerar de manera natural o artificial. Algunas de estas fuentes renovables están sometidas a ciclos que se mantienen de forma más o menos constante en la naturaleza.




 El Sol

Energía solar

La energía solar es una fuente de vida y origen de la mayoría de las demás formas de energía en la Tierra. Cada año la radiación solar aporta a la Tierra la energía equivalente a varios miles de veces la cantidad de energía que consume la humanidad. Recogiendo de forma adecuada la radiación solar, esta puede transformarse en otras formas de energía como energía térmica o energía eléctrica utilizando paneles solares.
Mediante colectores solares, la energía solar puede transformarse en energía térmica, y utilizando paneles fotovoltaicos la energía luminosa puede transformarse en energía eléctrica. Ambos procesos nada tienen que ver entre sí en cuanto a su tecnología. Así mismo, en las centrales térmicas solares se utiliza la energía térmica de los colectores solares para generar electricidad.


Se distinguen dos componentes en la radiación solar: la radiación directa y la radiación difusa. La radiación directa es la que llega directamente del foco solar, sin reflexiones o refracciones intermedias. La difusa es la emitida por la bóveda celeste diurna gracias a los múltiples fenómenos de reflexión y refracción solar en la atmósfera, en las nubes, y el resto de elementos atmosféricos y terrestres. La radiación directa puede reflejarse y concentrarse para su utilización, mientras que no es posible concentrar la luz difusa que proviene de todas direcciones. Sin embargo, tanto la radiación directa como la radiación difusa son aprovechables.
Se puede diferenciar entre receptores activos y pasivos en que los primeros utilizan mecanismos para orientar el sistema receptor hacia el Sol -llamados seguidores- y captar mejor la radiación directa.
Una importante ventaja de la energía solar es que permite la generación de energía en el mismo lugar de consumo mediante la integración arquitectónica. Así, podemos dar lugar a sistemas de generación distribuida en los que se eliminen casi por completo las pérdidas relacionadas con el transporte -que en la actualidad suponen aproximadamente el 40% del total- y la dependencia energética.
Las diferentes tecnologías fotovoltaicas se adaptan para sacar el máximo rendimiento posible de la energía que recibimos del sol. De esta forma por ejemplo los sistemas de concentración solar fotovoltaica (CPV por sus siglas en inglés) utiliza la radiación directa con receptores activos para maximizar la producción de energía y conseguir así un coste menor por kW/h producido. Esta tecnología resulta muy eficiente para lugares de alta radiación solar, pero actualmente no puede competir en precio en localizaciones de baja radiación solar como Centro Europa, donde tecnologías como la Capa Fina (Thin Film) están consiguiendo reducir también el precio de la tecnología fotovoltaica tradicional.





Energía solar térmica
Se trata de recoger la energía del sol a través de paneles solares y convertirla en calor el cual puede destinarse a satisfacer numerosas necesidades. Por ejemplo, se puede obtener agua caliente para consumo doméstico o industrial, o bien para dar calefacción a hogares, hoteles, colegios o fábricas. También, se podrá conseguir refrigeración durante las épocas cálidas. En agricultura se pueden conseguir otro tipo de aplicaciones como invernaderos solares que favorecieran las mejoras de las cosechas en calidad y cantidad, los secaderos agrícolas que consumen mucha menos energía si se combinan con un sistema solar, y plantas de purificación o desalinización de aguas sin consumir ningún tipo de combustible. Con este tipo de energía se podría reducir más del 25 % del consumo de energía convencional en viviendas de nueva construcción con la consiguiente reducción de quema de combustibles fósiles y deterioro ambiental. La obtención de agua caliente supone en torno al 28% del consumo de energía en las viviendas y que éstas, a su vez, demandan algo más del 12% de la energía en España.





La biomasa

La formación de biomasa a partir de la energía solar se lleva a cabo por el proceso denominado fotosíntesis vegetal que a su vez es desencadenante de la cadena biológica. Mediante la fotosíntesis las plantas que contienen clorofila, transforman el dióxido de carbono y el agua de productos minerales sin valor energético, en materiales orgánicos con alto contenido energético y a su vez sirven de alimento a otros seres vivos. La biomasa mediante estos procesos almacena a corto plazo la energía solar en forma de carbono. La energía almacenada en el proceso fotosintético puede ser posteriormente transformada en energía térmica, eléctrica o carburantes de origen vegetal, liberando de nuevo el dióxido de carbono almacenado.


 

El aire


Energía eólica

La energía eólica es la energía obtenida de la fuerza del viento, es decir, mediante la utilización de la energía cinética generada por las corrientes de aire.Se obtiene a través de una turbinas eólicas son las que convierten la energía cinética del viento en electricidad por medio de aspas o hélices que hacen girar un eje central conectado, a través de una serie engranajes (la transmisión) a un generador eléctrico.Es un tipo de energía verde.
La energía del viento está relacionada con el movimiento de las masas de aire que desplazan de áreas de alta presión atmosférica hacia áreas adyacentes de baja presión, con velocidades proporcionales(gradiente de presión).
El aerogenerador es un generador de corriente eléctrica a partir de la energía cinética del viento, es una energía limpia y también la menos costosa de producir, lo que explica el fuerte entusiasmo por esta tecnología.
Actualmente se utiliza para su transformación en energía eléctrica a través de la instalación de aerogeneradores o turbinas de viento. De entre todas las aplicaciones existentes de la energía eólica, la más extendida, y la que cuenta con un mayor crecimiento es la de los parques eólicos para producción eléctrica.
Un parque eólico es la instalación integrada de un conjunto de aerogeneradores interconectados eléctricamente. Los aerogeneradores son los elementos claves de la instalación de los parques eólicos que, básicamente, son la evolución de los tradicionales molinos de viento. Como tales son máquinas rotativas que están formadas por tres aspas, de unos 20-25 metros, unidas a un eje común. El elemento de captación o rotor que está unido a este eje, capta la energía del viento. Mediante el movimiento de las aspas o paletas, accionadas por el viento, activa un generador eléctrico que convierte la energía mecánica de la rotación en energía eléctrica.
Estos aerogeneradores suelen medir unos 40-50 metros dependiendo de la orografía del lugar, pero pueden ser incluso más altos. Este es uno de los grandes problemas que afecta a las poblaciones desde el punto de vista estético.
El gran beneficio medioambiental que reporta el aprovechamiento del viento para la generación de energía eléctrica viene dado, en primer lugar, por los niveles de emisiones gaseosas evitados, en comparación con los producidos en centrales térmicas. En definitiva, contribuye a la estabilidad climática del planeta.






El agua

 Energía hidráulica

La energía potencial acumulada en los saltos de agua puede ser transformada en energía eléctrica. Las centrales hidroeléctricas aprovechan la energía de los ríos para poner en funcionamiento unas turbinas que mueven un generador eléctrico. En España se utiliza un 15 % de esta energía para producir electricidad.
Uno de los recursos más importantes cuantitativamente en la estructura de las energías renovables es la procedente de las instalaciones hidroeléctricas; una fuente energética limpia y autóctona pero para la que se necesita construir infraestructuras necesarias que permitan aprovechar el potencial disponible con un coste nulo de combustible. El problema de este tipo de energía es que depende de las condiciones climatológicas.







Otras fuentes renovables de energía

Energía mareomotriz

La energía marina o energía de los mares (también denominada a veces energía de los océanos o energía oceánica) se refiere a la energía renovable producida por las olas del mar, las mareas, la salinidad y las diferencias de temperatura del océano. El movimiento del agua en los océanos del mundo crea un vasto almacén de energía cinética o energía en movimiento. Esta energía se puede aprovechar para generar electricidad que alimente las casas, el transporte y la industria. Los principales tipos son:
  • Energía de las olas, olamotriz o undimotriz.
  • Energía de las mareas o energía mareomotriz.
  • Energía de las corrientes: consiste en el aprovechamiento de la energía cinética contenida en las corrientes marinas. El proceso de captación se basa en convertidores de energía cinética similares a los aerogeneradores empleando en este caso instalaciones submarinas para corrientes de agua.
  • Maremotérmica: se fundamenta en el aprovechamiento de la energía térmica del mar basado en la diferencia de temperaturas entre la superficie del mar y las aguas profundas. El aprovechamiento de este tipo de energía requiere que el gradiente térmico sea de al menos 20º. Las plantas maremotérmicas transforman la energía térmica en energía eléctrica utilizando el ciclo termodinámico denominado “ciclo de Rankine” para producir energía eléctrica cuyo foco caliente es el agua de la superficie del mar y el foco frío el agua de las profundidades.
  • Energía osmótica: es la energía de los gradientes de salinidad.


     


Energía geotérmica

La energía geotérmica es aquella energía que puede ser obtenida por el hombre mediante el aprovechamiento del calor del interior de la Tierra.
Parte del calor interno de la Tierra (5.000 °C) llega a la corteza terrestre. En algunas zonas del planeta, cerca de la superficie, las aguas subterráneas pueden alcanzar temperaturas de ebullición, y, por tanto, servir para accionar turbinas eléctricas o para calentar.
El calor del interior de la Tierra se debe a varios factores, entre los que destacan el gradiente geotérmico y el calor radiogénico. Geotérmico viene del griego geo, "Tierra"; y de thermos, "calor"; literalmente "calor de la Tierra".




Ventajas y desventajas de las energías renovables


Ventajas
- Son respetuosas con el medio ambiente, no contaminan y representan la alternativa de energía mas limpia hasta el momento.

- Al generar recursos por si misma, la energía solar contribuye a la diversificación y el autoabastecimiento.

- Desarrolla la industria y la economía de la región en la que se instala.

- Genera gran cantidad de puestos de trabajo, los que se prevén en un aumento aun mayor de aquí a unos


Desventajas


- El primer freno ante su elección es en muchos casos la inversión inicial, la que supone un gran movimiento de dinero y que muchas veces la hace parecer no rentable, al menos por el primer tiempo.

- La disponibilidad puede ser un problema actual, no siempre se dispone de ellas y se debe esperar que haya suficiente


   

5.La energía nuclear,¿problema o solución?

La energía nuclear procede de reacciones de fisión o fusión de átomos en las que se liberan gigantescas cantidades de energía que se usan para producir electricidad.




Las centrales nucleares

Una central nuclear es una central termoeléctrica en la que actúa como caldera un reactor nuclear. La energía térmica se origina por las reacciones nucleares de fisión en el combustible nuclear formado por un compuesto de uranio.  El combustible nuclear se encuentra en el interior de una vasija herméticamente cerrada, junto con un sistema de control de la reacción nuclear y un fluido refrigerante, constituyendo lo que se llama un reactor nuclear. El calor generado en el combustible del reactor y transmitido después a un refrigerante se emplea para producir vapor de agua, que acciona el conjunto turbina-alternador, generando la energía eléctrica.

La central se ha realizado con un diseño específico que prevé estructuras civiles adecuadas, sistemas duplicados que responden al fallo previsto de uno de ellos y coeficientes de sobredimensionamiento para resistir el sismo máximo esperable, proteger contra las radiaciones ionizantes, prevenir los accidentes posibles y mitigar sus consecuencias. Por este motivo, los edificios de una central nuclear en comparación con una convencional de similar potencia son mucho más robustos y más grandes para alojar los sistemas redundantes instalados.









 El problema nuclear

Muchos países se oponen a la energía nuclear por diversos motivos:

- Hay un gran riesgo de accidentes, ya que las radiaciones liberadas por la fisión de los átomos de uranio afecta gravemente a todos los seres vivos.

- Se almacenan un gran numero de residuos nucleares producidos por las centrales en sitios especiales, pero la radiactividad la mantienen durante un largo período de tiempo, por lo tanto puede ser muy perjudicial para los seres vivos.

-Esta energía nuclear puede utilizarse para la creación de armas muy peligrosas con la que pueden causar miles de millones de muertes.

Por lo tanto es mejor no correr estos riesgos ya que son riesgos que pesan mas que las ventajas de este tipo de energía.









La solución nuclear

Lo que haría ponernos a favor de la energía núclear serian las siguientes pautas:

-  Es más barata en comparación con otros tipos de enegía.

- Las centrales nucleares tienen un rendimiento energético mayor en comparación con otros tipos de centrales.

- Nos da un suministro permanente de energía que no obliga a almacenamiento ni a desabastecimientos.

- Reserva mundial inmensa (Superior a la del petróleo)

- Menor contaminación directa, debido a que no contiene azufre y la producción de dióxido de carbono es mínima.

-Menor contaminación indirecta, pues no necesita transporte por carretera.
                                                                              

4.Centrales eléctricas que utilizan combustibles fósiles


En una central termoeléctrica, la producción de energía realiza a partir de la combustión de carbón, fuel-oil o gas en el interior de una caldera. Generalmente, este tipo de instalaciones se denominan centrales termoeléctricas convencionales, para diferenciaras de otras centrales termoeléctricas que, como las nucleares o las solares, generan electricidad también a través de un ciclo termodinámico, pero utilizando fuentes de energía diferentes de los combustibles fósiles y recurriendo a una tecnología muy avanzada mucho más reciente que la aplicada en las centrales termoeléctricas convencionales.




Combustibles fósiles utilizados

De forma general, puede decirse que el poder calorífico de un combustible está directamente asociado a sus contenidos en carbono e hidrógeno. Los restantes componentes del combustible (muy variables según la naturaleza de la materia prima) contribuyen a reducir esa potencia calorífica, a complicar el proceso de combustión y a generar una serie de subproductos cuya incidencia ambiental es frecuentemente negativa.
Los principales combustibles fósiles empleados en centrales termoeléctricas son, como ya se ha indicado:

-Gas natural: Constituido en su mayor parte por metano (CH4) y algunos otros hidrocarburos ligeros, es un combustible esencialmente limpio cuyo uso genera muy pocos productos residuales.

-Derivados líquidos del petróleo: Son fundamentalmente el fuelóleo y el gasóleo, obtenidos en el proceso de refinado del crudo. Sus características responden a especificaciones adaptadas a los requerimientos de las centrales térmicas. Tienen sin embargo una composición y un contenido en azufre que dan lugar a residuos de carácter contaminante (óxidos de azufre y nitrógeno, hollines, etc.).

-Carbones: Sin duda son los combustibles fósiles más complejos. Se trata de rocas sedimentarias heterogéneas originadas a partir de restos vegetales muy diversos, sometidos a altas presiones, elevaciones de temperatura y movimientos de la corteza terrestre. Como resultado de este largo y complicado proceso, en los yacimientos de carbón se encuentran, junto con los productos procedentes de vegetales, restos minerales ajenos que contribuyen a aumentar la variedad y calidad de los carbones.
Dependiendo del grado de carbonización existen una serie de variedades de carbones que, en orden ascendente de poder calorífico, son: turba, lignito, carbones subbituminosos, carbones bituminosos (hullas) y antracita.
Desde el punto de vista de su empleo como combustible, en cualquier carbón pueden distinguirse dos grandes fracciones:

-Materia carbonosa: Básicamente es la que aporta el contenido energético.

-Fracción estéril: Constituida por humedad (agua) y materia mineral (que normalmente se libera como ceniza).
Sin embargo, en ambas fracciones existen constituyentes muy diversos, como el azufre, nitrógeno, halógenos y otros elementos minoritarios, todos con importante incidencia ambiental. Por ello el uso de carbones resulta el más complejo de entre los combustibles fósiles.



Ventajas y desventajas de las centrales termoeléctricas

Ventajas

- Son las centrales más baratas de construir (teniendo en cuenta el precio por megavatio instalado).

- Las centrales de ciclo combinado de gas natural son mucho más baratas (alcanzan el 50%) que una termoeléctrica convencional, aumentando la enegía.

- Rebajando las emisiones citadas mas arriba en un 120%.

Desventajas

-El uso de combustibles fósiles  genera emisiones de gases de efecto invernadero y de lluvia ácida a las atmósfera.

- Al ser los combustibles una fuente de energía finita, su uso está ilimitado a la duración de las reservas.

-Sus emisiones térmicas y de vapor pueden alterar el microclima local.

- Afectan negativamente a los ecosistemas fluviales debido a los vertidos de agua caliente en estos.



3.El consumo energético doméstico

¿Cuánta energía consumimos?
El total del consumo de energía en el sector doméstico asciende a 42 millones de toneladas equivalentes de petróleo (tep). La unidad tep es la que se utiliza corrientemente para medir el consumo de energía final. Expresado en términos de consumo medio por hogar y año, tenemos aproximadamente tres toneladas equivalentes de petróleo para un domicilio medio ocupado por tres personas, es decir, el equivalente a más de 2,5 litros de petróleo por persona al día.
¿Qué tipos de energía consumimos?
Aunque el consumo de energía se mide en tep, en realidad el sector doméstico utiliza muchos tipos de combustibles diferentes, algunos procedentes del petróleo, pero otros no.

• La electricidad supone la tercera parte del consumo de energía en los hogares. Y la electricidad, a su vez, se produce en centrales térmicas (que queman carbón, petróleo o gas), nucleares y renovables (principalmente hidráulicas y eólicas). Un minúsculo porcentaje procede de paneles fotovoltaicos. Es el uso más versátil de todos, empleado para todo tipo de aplicaciones.

• Butano y propano suponen una quinta parte. Se emplean en calefacción, producción de agua caliente y cocinas.

• Los combustibles sólidos incluyen carbones y leñas. Se utilizan casi exclusivamente para calefacción, y suponen una quinta parte del consumo total.

• El gas natural es el tipo de energía doméstica de más rápido crecimiento. Se usa para las mismas aplicaciones que los gases licuados del petróleo, y supone una sexta parte del consumo.

• El gasóleo C supone algo más del 10% del consumo. Se usa exclusivamente para calefacción y agua caliente.

• La energía solar térmica (paneles solares para producir agua caliente) supone un porcentaje muy pequeño del consumo total. No obstante, parece estar en crecimiento, y desde luego es un tipo de energía ideal para ciertas aplicaciones en el sector doméstico.

Como se deduce de esta lista, los hogares se abastecen en un 80/90% de energía fósil (carbones, derivados del petróleo y gas natural). La energía renovable procede de la electricidad generada en centrales hidráulicas, de la leña y de los paneles solares, tanto térmicos como fotovoltaicos, así como de las centrales eólicas.


 

El ahorro de energía en casa

Calefacción:


-No abras las ventanas con la calefacción encendida.

-Para ventilar la casa son suficientes 10 ó 15 minutos.

-No tapes las fuentes de calor con cortinas, muebles o elementos similares.

-Instala un termostato en la calefacción y regúlalo para una temperatura de no más de 20º C en invierno, por cada grado adicional gastarás aproximadamente un 5% más de energía.

-Revisa periódicamente el estado de la caldera, aumentará su eficiencia y su duración.

-Cierra los radiadores que no precises y apaga completamente la calefacción si tu casa va a estar desocupada.

-Prefiere en este orden: solar, biogás, biomasa, leña, gas natural, propano o butano. Evita la electricidad.

 
    




Aislamiento:

-A la hora de realizar reformas en tu vivienda, no dudes en colocar un aislamiento térmico en los cerramientos exteriores.

-Instala doble acristalamiento en lugar de doble ventana.


 


Electrodomésticos:

Ten en cuenta el etiquetado energético en los electrodomésticos
El etiquetado energético informa al usuario sobre el consumo de energía y otros datos complementarios relativos a cada tipo de aparato a lo largo de su vida, por ejemplo: el ruido, la eficacia de secado y de lavado, el ciclo de vida normal, etc.


 
Categoría de eficiencia energética
Consumo de energía
Evaluación
A
<55%
Bajo consumo de energía
B
55-75%
C
75-90%
D
90-100%
Consumo de energía Medio
E
100-110%
F
110-125%
Alto consumo de energía
G
> 125%


Mediante esta clasificación, se pueden comparar electrodomésticos del mismo tipo. Así, si se elige una lavadora de clase A, se consumirá menos de la mitad que otra de clase E, lo que supondrá un ahorro muy grande a lo largo de la vida útil de la lavadora.

-Al comprar un electrodoméstico fíjate en su etiqueta energética.

-Utilizarlos preferentemente de noche, cuando la demanda de energía es más baja.
Para un lavado más respetuoso con el medio ambiente

-Lava en frío o baja temperatura, el 90% de la electricidad que se consume es para calentar el agua. Utiliza preferentemente los ciclos de lavado a 30º o 40 º y evita los de 90 º.

-Para el lavado llena la lavadora y emplea programas económicos.

-Utiliza la dosis de detergente recomendada por el fabricante.

-Limpia periódicamente los filtros, un óptimo rendimiento garantiza un menor consumo.

-Limita el uso del prelavado a las prendas muy sucias.

A la hora de lavar los platos

-Elige el programa más económico: éste limita el consumo de agua y calienta a una temperatura adecuada (50º C).

-Evita aclarar los platos antes de ponerlos en el lavaplatos.

-Utiliza detergentes ecológicos.





 

Para un uso eficiente de la nevera


-El frigorífico sitúalo alejado de las fuentes de calor y con suficiente ventilación.

-Mantén una distancia mínima entre la nevera y la pared.

-Deja que los alimentos calientes se enfríen completamente antes de colocarlos en la nevera.

-Evita mantener la puerta abierta mucho tiempo: puede ahorrar hasta un 5% de energía.

-Descongelar cuando la capa de hielo supere los 5 mm.

-Descongelando los alimentos en el interior de la nevera aprovechamos la energía que se ha utilizado para congelarlos.

 



Iluminación:


-Aprovecha la luz del día.

-Apaga las luces al salir de las habitaciones.

-Utiliza luces próximas para trabajos como leer, estudiar...

-Sustituye las bombillas "normales" por otras de bajo consumo.

-Si tienes instalados tubos fluorescentes, continua utilizándolos, consumen mucho menos que las bombillas tradicionales.

-Utiliza balastos electrónicos en vez de magnéticos en los tubos fluorescentes, y no los dejes encendidos si no los vas a usar.

-Mantén limpias las bombillas, tubos fluorescentes y reflectores.










Aire acondicionado:

-Antes de comprar un aparato de aire acondicionado, plantéate si realmente lo necesitas.

-Cierra las ventanas y baja las persianas en las horas de más calor y ábrelas cuando refresque.

-Colocar el aparato de aire acondicionado en una parte sombreada.

-Utilizarlo siempre a una temperatura razonable.

-Mantén limpios los filtros del aire acondicionado y no lo uses con las ventanas abiertas.





Cocina y horno:


-Cocinar con olla a presión y con poca agua supone un ahorro del 50% de energía.

-Tapando las ollas, cazuelas y sartenes conseguiremos ahorrar un 25% de energía.

-La mejor opción para cocinar es el gas natural o butano, pero debemos mantener en buen estado los quemadores y evitar que la llama sobrepase el fondo de los recipientes.

-No abrir la puerta del horno si no es imprescindible

-No usar el horno para cocinar pequeñas cantidades de alimentos, ni para recalentar o descongelar.





Agua caliente:

-Una temperatura del agua de 40º C es suficiente para ducharse.

-Ahorrando agua caliente ahorramos energía.





Ordenadores:

-Compra ordenadores que estén dotados de sistemas de ahorro de energía.

-El monitor es el principal responsable del gasto eléctrico de los ordenadores y su tamaño determina su consumo energético.


El gasto de los electrodomésticos "en reposo”:

Muchos electrodomésticos siguen consumiendo energía mientras están apagados. Son los que quedan con un piloto encendido en posición de reposo o stand by a la espera de que alguien accione el mando a distancia, o los que funcionan con corriente continua e incorporan un transformador que permanece siempre encendido (radiocasetes, minicadenas, etc.), u otros que permanecen encendidos se empleen o no, como el vídeo, el amplificador de antena o el teléfono sin hilo. Estos consumos, pequeños pero permanentes, pueden hacer que un aparato consuma más energía en el tiempo que está en espera, que en el que está en uso. Por ello apaga los aparatos que queden conectados permanentemente a la red, exige a los fabricantes que indiquen en las etiquetas el consumo en reposo del aparato y elige aparatos que no registren consumos internos cuando no se usen.





2.Los combustibles y el transporte.

Transporte y energía

El transporte es un consumidor importante de energía, la cual se obtiene transformando combustibles, mayoritariamente mediante motores de combustión. En el proceso de combustión se generan emisiones gaseosas (CO2, CO, NOx, SOx y otros, como partículas) cuya nocividad depende de la fuente de energía usada.
Suele sostenerse que los vehículos eléctricos impulsados son "limpios", al igual que aquellos que usan celdas de hidrógeno. Pero, en realidad, estos tipos de vehículos generan, hoy en día, mayor contaminación que los vehículos de combustión interna. La razón es que la generación de hidrógeno o electricidad consume energía producida en centrales alimentadas principalmente por carbón, es decir, las centrales que se usan fuera de período pico. La producción de hidrógeno o el almacenamiento en baterías introduce pérdidas del orden del 60% de la electricidad producida y, por lo tanto, triplica la cantidad de contaminación producida en las plantas de carbón. En general, se estima que el uso de vehículos de hidrógeno aumentará la cantidad de carbono y azufre en la atmósfera (responsables del calentamiento global y la lluvia ácida) pero disminuirá la cantidad de compuestos de nitrógeno (responsable del "smog" o "humo-niebla"). Tienen, eso sí, la ventaja (o desventaja) de que permiten centralizar la contaminación en un solo lugar y hacer más fácil su tratamiento (u ocultamiento).
Dado que se prevé el agotamiento de combustibles fósiles hacia el 2050, el transporte mundial enfrenta el reto de modificar completamente sus sistemas en algo menos de cinco décadas. Se prevé que los vehículos de hidrógeno serán los más económicos, si se extrapolan las tecnologías actuales, con lo cual deberemos aprender a producirlo por otros métodos distintos del altamente contaminante que se usa hoy en día (tratamiento de gas natural con vapor), que genera inmensas cantidades de dióxido de carbono, si queremos que su uso no contribuya aún más al calentamiento global.
Durante los últimos años los vehículos han estado haciéndose más limpios, como consecuencia de regulaciones ambientales más estrictas e incorporación de mejores tecnologías, (convertidores catalíticos, etc.), y, sobre todo, por un mejor aprovechamiento del combustible. Sin embargo, esta situación ha sido más que compensada por la subida tanto del número de vehículos como del uso creciente anual de cada vehículo, lo cual determina que ciudades con más de 1.000.000 de habitantes presenten problemas de índices de contaminación atmosférica excesivos, afectando la salud de la población.




Hacia un transporte inteligente

Para un transporte inteligente deberiamos de seguir unas pautas, como las que vamos a mencionar :

1. Utilizar vehículos y combustibles más limpios

Objetivo principal: Fomentar el desarrollo y uso de vehículos y combustibles limpios.

La mejora, tanto de los vehículos como de los combustibles que utilizan los mismos, son dos de los factores básicos de los que depende la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero y la calidad del aire en las ciudades.

El potencial de los sistemas de transporte inteligentes, las innovaciones tecnológicas y las inversiones en telemática para aumentar la eficiencia del transporte, reducir la congestión y mejorar la seguridad y el rendimiento medioambiental es enorme y debe ser aprovechado de

forma óptima para contribuir al logro de los objetivos de la sostenibilidad.










2. Fomento del transporte público y desplazamientos saludables

Objetivo principal: Reducir y racionalizar las necesidades de transporte, fomentando el uso del transporte público y otras iniciativas que contribuyan a reducir el uso del vehículo privado.

Las ciudades han experiementado en lo súltimos años un notabe crecimiento y expansión que ha contribuidao ha incrementar notablemente las necesidades de desplazamiento de la población (trabajo, escuela, ocio, compras, etc) en modelos que requieren sistemas de transporte público eficaces para poder ser sostenibles.

Ello requiere dar un gran impulso a la gestión inteligente del transporte público urbano avanzando en la integración modal, el desarrollo de sistemas de gestión inteligente del tráfico y la creación de condiciones que permitan recompensar a los usuarios por su decisión de hacer uso de las alternativas.







3. Sostenibilidad en el transporte de mercancias

Objetivo principal: Capacitar a la red de equipamientos y servicios logísticos para garantizar la multimodalidad del transporte de mercancías.

El movimiento de mercancías utilizando más de un modo de transporte supone la reducción de los costes tanto sociales y ambientales (reducción de la contaminación atmosférica y acústica, reducción del consumo de recursos, seguridad viaria) como infraestructurales (reducción del tráfico y la congestión, mejora del aprovechamiento de la capacidad de los sistemas de transporte).






 
4.Educación vial, conducción eficiente e información
  
Objetivo principal: Participar en la mejora de la educación vial y del uso inteligente del vehículo.

Es fundamental continuar trabajando en la mejora de la educación vial e incorporar aspectos de conducción sostenible y segura a la formación de los conductores, debido a que el comportamiento del ciudadano ante la conducción determina el avance en cuestiones como la reducción de los accidentes de tráfico y la mejora del comportamiento ambiental del sector del transporte.





  

1.La energía: Necesaria y escasa


La energía hace funcionar el mundo. La energía es necesaria para el desarrollo económico de los países y para la mejora de la calidad de vida. Pero la energía es escasa y cara, por lo que es necesario adoptar medidas para el ahorro y su uso eficiente. El consumo eficiente de enrgía consiste en desarrollar las tareas con el mínimo consumo de energía posible y en no malgastar energía en actividades innecesarias. Se pueden adoptar medidas de ahorro en todos los sectores.

El problema energético

La energía no se va a acabar, eso es una verdad irrefutable, mientras que exista el sol habrá energía en la tierra.
Y si el sol deja de existir, la tierra desaparecerá, el hombre desaparecerá con ella y el problema energético dejará de existir.
No importa que se terminen las energías fósiles aprovechables, aun quedará la energía nuclear y las energías renovables.
Además quien nos dice que dentro de poco no podremos emplear otro tipo de energías como por ejemplo la gravitatoria o los campos magnéticos terrestres.
El problema en realidad no es que en un futuro próximo nos quedemos sin energía, el problema real será el precio a que será producida, distribuida y vendida.
Los estados, las naciones, las empresas y familias que no se preparen para afrontar este problema sufrirán mucho en el futuro a causa del problema energético.
Las últimas medidas del Gobierno en materia energética, para ayudar a las renovables y a la industria del carbón nacional, tendrán un sobre coste en el recibo de la luz en los próximos cuatro años de 30.000 millones de euros, según cálculos del propio Gobierno y de la Comisión Nacional de Energía (CNE).
En España hay 16,5 millones de hogares, lo que supone un coste medio por cada uno de 1.818 euros.


      

 



primaria y energía final

Entendemos por energía final a la energía tal y como se usa en los puntos de consumo, por ejemplo, la electricidad o el calor del horno que utilizamos en casa. La energía primaria es la contenida en los combustibles, antes de pasar por los procesos de transformación a energía final.
Para que la energía esté dispuesta para el consumo, son necesarias sucesivas operaciones de transformación y trasporte, desde el yacimiento a la planta de transformación y, por útlimo, al consumidor final. En cada una de las operaciones se producen pérdidas.
Así, considerando todas las pérdidas, para cada unidad energética de electricidad que consumimos en casa son necesarias unas 3 unidades energéticas de combustibles fósil en las centrales térmicas.
En el caso del gas natural ha sido necesario extraerlo de su yacimiento, transportarlo por gasoconductos o barcos y finalmente distribuirlo a baja presión a los puntos de consumo.
El petróleo, asimismo, hay que extraerlo, transportarlo a las refinerías a través de oleoductos o buques de carga, transformarlo en productos finales aptos para el consumo, gasolina, gasóleo, etc., y posteriormente, distribuir estos productos finales a los puntos de consumo.



     



El problema enegético